jueves, 4 de octubre de 2012

Síndrome Calabaza

Alguien me escribió por WhatsApp lo siguiente, y me da vueltas en la cabeza muy seguido, mas de lo que quisiera,
"Y en el fondo buscas mas normalidad y es lógico, no todos logramos mantener el gusto por lo que queda por descubrir, mas que por lo que ya esta establecido... De verdad entiendo".- 
Siempre tratando de encajar, de mostrarte normal, casi imperceptible, casi inmutable, fuerte, aplastante, sarcástica, irónica, directa... Capas de invisibilidad... máscaras para ocultar mis miedos.

No se cuando deje de ser lo que quería ser, cada vez que me mostraba, fui juzgada, criticada y colocada en el banquillo del acusado, dedos apuntándome, ojos penetrando mi piel hasta llegar a las entrañas.

Comencé mi búsqueda de la normalidad, me obligue a ser como el resto, a sentir como el resto, a comportarme como el resto... y es eso lo que hacemos, buscamos entrar en la sociedad, aunque sabemos que no pertenecemos a ella del todo.

Mirar rostros, imaginarme sus vidas, sus penas, sus ganas, su falta de sexo, sus voces, sus gemidos de placer. Un roce en la micro, una mirada fugitiva, un chico con audífonos, todos con audífonos, alguien leyendo un libro, parejas besándose, sudor, ternura...

Escondernos bajo las sábanas, decir palabras tiernas, reírnos de este amor infinito... son recuerdos que me golpean fuerte, sumergirme en la tristeza, los anhelos y el perpetuo rechazo de quienes amé.

¿les pasa que cuesta ser uno mismo, porque quienes amas, no pueden amarte tal como eres?, siento eso desde que tengo memoria, mi madre, nunca me ha hecho sentir en casa, nunca he sentido ese apego, ese lazo irrompible, esas ganas de lanzarme a sus brazos y llorar, o reírme a carcajadas. Si, juzguen, critiquen y díganme que soy una mala agradecida y lo típico que se dice en estos casos desnaturalizados.

Como una extranjera en estas paredes, como una extranjera en la vida, deambulo con la mirada perdida o estancada en algún punto sin retorno...

Después de todo no soy tan sincera, me miento a mi misma muchas veces, por mucho tiempo, y con muchas sensaciones. Me dejo llevar y siempre salgo desnuda y bien maltratada, y cuando no lo hago me pregunto a diario "¿que hubiera pasado si...?"... es un total caos mi vida en general, ya no se si vengo o si voy, o si en realidad nunca avancé...

Quiero un amor de esos que te vuelan la cabeza y te quitan la ropa en cada rincón, sentirme exitada y enloquecida con solo sentir su respiración o el roce de sus dedos por mi espalda. Ya no quiero conformarme con "es lo que puedo darte por ahora" o "es lo que me nace", quiero o todo o mejor no quiero nada. Quiero recibir tal cual como lo doy, ya no me sirven las migajas. ya me cansé de sus "Te amo" baratos y con fechas de caducidad. Quiero sinceridad, quiero realidad, y sin embargo huyo cuando lo percibo desbordante...

Ya no se que hacer conmigo, nadie sabe, ya soy intolerable hasta para mi propio hijo, porque no se si soy su madre o su hermana, o sigo siendo extranjera incluso para el.

Una bicho raro, una nerd, una ñoña, una cosa extraña sin forma exacta, una romántica fatalista, una seudo masoquista, una caminante, una perdida sin rumbo, una hija que se siente incomoda con su madre, una estúpida y sensual cosa rara...

Puede que me lean, o puede que no, pero si algún síntoma presentan de toda esta mierda contradictoria, de toda esta explosión de ser y no ser, entonces los contagie con mis letras.

1 comentario:

  1. Buscar o tratar de llegar a ser como el resto de los normales es, para mi, engañarse a uno mismo. Tal como lo dice el comercial: usted, es usted. Es esa esencia que emana de tu personalidad la que te hace tan unica y especial al resto y para quienes te conocen. Capaz cuantos mas de esos normales se vieron en la necesidad de ser como el resto por sentir que no encajaban y dieron su brazo a torcer para tratar de ser aceptados. La puerta es bien ancha y a pesar de que pueda leerse tajante y radical, si no le gusta puede continuar, pero no por eso vas a perder parte de tu personalidad o forma de ser solo por tratar de encajar.

    Tu forma de ser es lo que te hace especial para quienes te conocen, y aun cuando quizas sean pocos los que lo aprecian, vale mas que querer ser aceptada siendo alguien que no eres.

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